Calaveritas con la Tía Betty

¡Sobris de mi vida y de mi corazón! 

Bienvenidos una vez más al Rincón de la Tía Betty, o sea yo. En esta ocasión no será una receta, pero igual será maravillosa. Aunque no lo parezca, el Día de Muertos está más cerca de lo que parece y obviamente como buena tía consentidora les diré como hacer una calaverita literaria digna de primer lugar en el concurso de la escuela o del trabajo. 

Antes de comenzar, quisiera decirles que me llena de dicha verlos cuando están acá en la casa o cuando dan like, comentan o comparten mis publicaciones, son lo máximo. La familia sigue creciendo y todo es gracias a ustedes. Ahora sí, vámonos con esta bonita notita donde aprenderemos a hacer versos, sin esfuerzos.

1.- Rimas consonantes 

Realmente no existe una “regla” establecida, sin embargo la forma más sencilla de hacer una calaverita es utilizar rimas consonantes. Pueden ser básicamente de dos tipos: A, B, B, A (Que las últimas palabras del primer y último verso suenan igual o muy similar, así como las de las dos de en medio) y A, B, A, B (Que el primer y tercer verso rimen de la misma manera que el segundo y el cuarto). 

Este es un A, B, B, A.

“La huesuda es la que rige (A)

la vida de Salmerón: (B)

hoy lo arrastran al panteón (B)

los sicarios de Jalife”. (A)

Este es un A, B, A, B.

La flaca fue por Gael (A)

hasta el set de filmación, (B)

pa que el tiempo haga de él (A)

una estrella del panteón. (B)

2.- Mencionar a la muerte es fundamental 

El objetivo de las calaveritas es hablar de una forma “simpática” de cómo y por qué la muerte se llevó al panteón a determinada persona o personaje, así que debe aparecer sí o sí en el texto. Lo divertido de esto es que le pueden llamar de diferentes maneras, muerte, calaca, parca, huesuda, calavera, catrina o pelona, pero siempre tiene que estar y siempre tiene que “llevarse” a la persona a la que se le dedica la rima.

3.- Va con dedicatoria 

Como el argumento siempre será que a alguien se lo lleve la muerte, se deben incluir características de la persona a la que se le está dedicando la calaverita. Por ejemplo, si es un futbolista, la muerte puede hacerle falta y (dejar que muera de tristeza, broma de tía. XD) dejarlo tirado en el césped. No se limiten a profesiones, también pueden hacerlo acerca de características intangibles como el humor o forma de ser.

4.- Con amor, pero sobre todo con humo 

No es obligatorio que dé risa, pero escribir una calaverita tiene que ser divertido, por eso les recomiendo mezclar lo inevitable de la muerte, con el amor y el humor. 

6.- Cantadita será más bonita 

Antes de escribir, mejor canten. Esta técnica nos la enseñan desde niños y la verdad funciona increíblemente, hasta te da emoción cuando te sale. A mi me ha funcionado cuando intento cantarlas con las tonadas de canciones muy mexicanas.

Ahora sí, no hay pretexto y espero me compartan sus calaveritas en cualquiera de mis redes sociales o hasta por whats, échenme un inbox y se los paso. Recuerden que nuestras tradiciones son mágicas y es nuestro deber mantenerlas vivas.  

Gracias por leerme. 

Yo soy la Tía Betty y es un placer compartir con ustedes ¡Hasta la próxima!